EL BARRIO DE RECOLETA SE VISTIÓ DE FADO
Los libros son arte impreso. La música es arte sentimental. Y en la noche del viernes se dieron la mano ya que en la Biblioteca Café, un cálido lugar donde se escucha música rodeados de libros colocados en estantes, tuvo lugar el espectáculo que brindó la cantante Mariana Accinelli, acompañada, como siempre lo hace, de los músicos Leandro Cacioni y Diego Capaccioli en guitarras y Hernán Crespo en acordeón.
El show comenzó con el famosísimo fado Extraña forma de vida, cantado buena parte a capella, y luego con la suma de la guitarra, trasladando a los presentes, a través de esta canción, a la nostalgia del fado.
En un fluir constante entre las dos orillas que separan Argentina de Portugal, y sorteando la niebla del Riachuelo, se pudo presenciar un espectáculo de música que conectaba tanto al tango como al fado, en una especie de hermandad incuestionable.
Una señora, acompañada por un amigo, ambos franceses, contó que viajó por primera vez a la Argentina en la década del '80, y que desde ese viaje, ya vino cuatro veces a nuestro país, enamorada de sus calles y su gente.
Y como también le gusta el fado, presenció el show, quedando altamente gratificada por la noche pasada entre buenas canciones, interpretaciones y buena comida.
La cantante anunció que ya está terminada la grabación del disco y que pronto estará a disposición de los interesados.
Como habitualmente hacen los músicos que formaron parte del espectáculo demostraron su talento poniendo alma y corazón en cada una de las canciones interpretadas.
Homenajes que se le vienen haciendo al fado, Patrimonio Cultural de la Humanidad, son cada uno de los show que se brindan en la Ciudad de Buenos Aires.
El del vienes en la Bibliotca ano fue la excepción.
Andrea Lopes
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